Con la imposición de las cenizas, el miércoles pasado, comenzamos el Tiempo litúrgico de Cuaresma. CUARESMA quiere decir cuarenta días,cuarenta días que nos propone iniciar un camino de renovación de vida, de conversión, y de esfuerzo. Pero la Cuaresma, también es un camino de gracia, que nos prepara y dispone el corazón, a celebrar, la “Fiesta de las Fiestas”, la Pascua. La Cuaresma es un caminar hacia la Pascua. Son cuarenta días especialmente dedicados a la oración, la penitencia y la caridad, para celebrar, purificados y gozosos, la resurrección de Jesús.
En este 1º domingo de Cuaresma, se nos invita a reflexionar las consecuencias del pecado original y las tentaciones que siempre nos acechan. La liturgia nos inculca la confianza en Dios, como medio seguro para superar las tentaciones y dificultades de la vida. El color litúrgico de este tiempo es el morado, que representa una gozosa austeridad,penitencia,en definitiva, representa nuestro deseo de conversión. Cada uno de nosotros tendremos que preparar nuestro corazón, caminando guiados por Jesús haciendo cosas buenas, con una entrega generosa y confiada en su amor.
Ayer, tuvieron lugar además en nuestra parroquia, los bautizos de seis niños que harán este año la Primera Comunión. Estuvieron arropados además de por sus padres y padrinos, por todos sus compañeros de catequesis y sus catequistas que vivieron un momento muy emotivo y alegre ya que la familia de los cristianos aumentaba.
¡Alegrémonos hermanos y demos la bienvenida a estos nuevos miembros de la comunidad!
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